jueves, 31 de diciembre de 2015

Media Maratón de Córdoba 2015. 2ª



…En el kilómetro doce de carrera, coincidiendo con una recta muy prolongada, alcanzo al 1:50. Nada mas hacerlo, puedo ver a lo lejos el siguiente “globo”. Mi posición debe ser entre ambos para terminar con el tiempo previsto. 

Mis fieles seguidoras
Tras pasar, otra vez, por el centro de Córdoba, salimos a los barrios periféricos de la ciudad, donde las calles son más largas, apenas faltan ya seis kilómetros para el final, y veo que estoy muy cerca de la marca de 1:40. Debo ir por debajo de 4:30 el kilómetro y todavía puedo algo más, así que…  aumento el ritmo “hasta donde aguante.” El 1:45 lo tengo ya. Si no pasa “algo”.

En el kilómetro diecinueve alcanzo al globo de 1:40. Llevo un ritmo de 4:10, 4:15, y me siento con fuerzas de aguantar, así que lo decido mantenerlo. A mal que me salga ya voy por debajo de mi marca prevista. Entro en meta en 1:37:40, casi ocho minutos menos de lo previsto; sin dolerme nada, y con la sensación de haber podido apretar más.
 
La llegada es un poco caótica, está en pleno Casco Histórico, y el público lo abarrota todo. No veo a la familia, ya había quedados con ello en que si no nos viéramos a la llegada, nos iríamos al hotel, así que tras estirar un poco, me voy para allá... corriendo, todavía me quedan ganas. 

Para finalizar, como siempre que corro esta media, un pequeño “festival”, para mí y los míos, en el Caballo Rojo y su maravilloso carro de postres.

No hay quien se resista a probarlos todos.


,,!,,

lunes, 28 de diciembre de 2015

Media Maratón de Córdoba 2015. 1ª



Amanece en la Judería. Algo de nubes, apenas siete grados, y una brisa suave  mantiene limpio el aire de la mañana. Me dirijo junto a mis incondicionales hacia la salida de la carrera. Como tengo entrada reservada en el cajón 4, por ser federado, me entretengo calentando unos kilómetros antes de dirigirme a la salida. 


Vaya chasco: diez minutos antes de las 10:00, hora prevista de salida de la carrera, me dirijo al “cajón 4”, ¡CERRADO! El “5” también, y el  “6”, y el “7”… total, que de salir con doscientos o trescientos corredores delante,  tuve que entrar por el final del todo y salir con ocho mil “corredores” cerrando el paso. Fíjate tú para lo que me ha servido estar federado. Tampoco es el fin del mundo. Total, tengo previsto hacer un tiempo de 1:45; a poco que apriete a partir del kilómetro siete u ocho, creo, lo tengo; Así que no me preocupo… en exceso.


Salida a la hora prevista. El planteamiento que me hago en ese momento es hacer una carrera progresiva, así que me paso los primeros kilómetro disfrutando del paisaje, los chascarrillos de los que tengo alrededor, y esquivando a los que van “a terminarla”. En el kilómetro tres consigo coger al globo que marca el ritmo de las dos horas, y puedo ya ir marcando un ritmo de  cinco minutos el kilómetro, aunque a esa altura todavía tengo que ir esquivando al personal para mantener el ritmo. Lo que no veo el globero que marca “1:50”. Tras el avituallamiento que hay en el kilómetro cinco, veo a lo lejos el “globito” de una hora y cincuenta, y acordándome de Chiquito del la Calzá: ¡Al ataqueeeel! A esa altura de la carrera ya voy por debajo de cinco minutos el kilómetro, y cómodo… (to be continue.)